¿Qué es mejor, la carne o el pescado? Cuando hablamos de gustos, cada persona es un mundo y mientras unos defenderán la carne otros harán lo propio con el pescado. Pero más allá de lo que te guste más, hay que buscar una serie de razones nutricionales para apostar más por uno que por otro y cerrar la discusión.
En la famosa pirámide de los alimentos nos encontramos con que la carne y el pescado comparten el penúltimo escalón antes de llegar a la cima, lo que nos indica que se deben consumir pero con moderación. De hecho existen muchos mitos sobre el pescado y sus grasas, pero como recomendó la Sociedad de Cardiólogos Americana hay que comer pescado tres veces a la semana, a ser posibles dos de ellas pescado azul y la otra pescado blanco. Esta recomendación se ha ido extendiendo poco a poco entre todos los cardiólogos del mundo.
Otra forma de valorar si es mejor la carne o el pescado comparar su aporte nutricional, pero el empate se mantiene si nos fijamos en las proteínas. Una porción de carne blanca (pollo, pavo) tiene las mismas proteínas que un trozo de pescado azul (salmón, atún, sardinas); pero atención a las grasas: el pescado azul tiene más grasas que la carne blanca. Eso sí, generalmente se trata de grasas saludables como los ácidos grasos omega 3, imprescindibles para que nuestro organismo funcione y que ayudan, entre otras cosas, a bajar el colesterol.
Un dato interesante es el que dice que países como España, Japón o Noruega, con un gran consumo de pescado, tienen una mayor esperanza de vida. Esto nos devuelve al argumento de las grasas, en concreto las grasas saludables. Los porcentajes de grasas saturadas en la carne van del 4,7% de la vaca al 6,3% del cerdo o el 16,6% del cordero -y eso cogiendo los cortes magros-, mientras que en el caso de los pescados el conjunto de grasas no supera el 5%. Sí que lo hace el azul, pero como decíamos antes se trata de grasas saludables.